Claro, tenemos un amplio grupo de personas “básicamente iguales” sobre las que parece que existe una situación genérica que altera su actividad individual y colectiva. Dentro de este pensamiento simplista no es raro que algunas personas definan esta situación como un problema común a todos ellos y prescriban una buena capa de “ungüento amarillo” como remedio genérico para el colectivo.
Pero todas esas personas presentan distintos matices personales y emocionales, características que, lejos de hacerles genéricamente parecidos, les hacen “totalmente diferentes”, entonces es el momento en el que el “artillero” se percata de que la solución de los “cañonazos” tiene poco efecto sobre la mayor parte de las “moscas”. Continue reading