Libera tu potencial y alcanza el éxito

Libera tu potencial

Sir John Whitmore, en su libro Coaching, analiza la esencia del coaching y cita que ”consiste en liberar el potencial de las personas, para que puedan llevar su rendimiento al máximo”.

Esta afirmación podría quedar en una simple reflexión del autor, si no estuviera avalada por multitud de testimonios de distintos profesionales de ámbitos diversos que han comprobado los grandes resultados de este proceso de desarrollo personal, ya sea como facilitadores, clientes e incluso ambas posiciones.

En un entorno económico y social cada vez más complejo, el hecho de contar con todas las armas al alcance de los ejecutivos que les capaciten y faciliten su labor profesional, con el objetivo de desarrollar sus funciones con óptimos resultados, es uno de los factores que en la actualidad se ha convertido en una necesidad para muchos de ellos, llegando en algunos casos a convertirse en  una búsqueda obsesiva del mejor método de trabajo.

Todas esas armas son al fin y al cabo herramientas de defensa y lucha de cara al mundo exterior, pero existe un mundo interior para el que en muchos casos no se está preparado, porque entre otras cosas muchas veces ni se ha pensado en su importancia.

La lucha en las batallas cotidianas no permite en muchas ocasiones preocuparse de la guerra interior que puede estar marcando la diferencia entre lo que cada uno pretende, desea, siente, percibe y decide, pero la mala noticia es que en muchas ocasiones acabadas todas las batallas y sea cual sea el resultado de las mimas, la guerra interna no ha finalizado.

El conocimiento de uno mismo es en muchos casos la clave del éxito, no se trata de una reflexión actual, Sun Tzu en su libro El Arte de la Guerra citaba “Si conoces a los demás y te conoces a ti mismo, ni en cien batallas correrás peligro; si no conoces a los demás, pero te conoces a ti mismo, perderás una batalla y ganarás otra; si no conoces a los demás ni te conoces a ti mismo, correrás peligro en cada batalla” y se trata de una obra que data del siglo V a.C., pero no por ser muy conocida deja de ser importante.

Tal vez la solución para muchos sea pensar en lo que nunca se ha pensado, sentir lo que nunca se ha sentido y experimentar lo que nunca se ha experimentado, pero para lograr ganar la guerra interior hay que estar dispuesto a luchar en un campo de batalla muy distinto y sin armas.

También puede gustarte...

Deja una respuesta